El recuerdo como delirio, razón y liberación en la literatura







La lectura de una obra literaria cualquiera trae consigo un ejercicio de literatura comparada. No es obligatorio identificar marcas textuales y/o temáticas de otras obras artísticas, pero si resulta muy interesante identificarlas para lograr un dialogo entre éstas y la obra leída, por la forma como un tema puede ser tratado de diferentes formas. Delirio (2004) de la escritora colombiana Laura Restrepo no se queda atrás. La historia de Agustina Londoño, comparte aspectos con la historia de Auxilio Lacouture, narradora y protagonista de  Amuleto  (1999) del escritor chileno Roberto Bolaño y  de Lucy Nelson protagonista ausente de  Cuando ella era buena (1967) del escritor estadounidense Philip Roth. La intención de este ensayo radica en la reflexión y el diálogo establecido a partir de la lectura de estos tres productos artísticos  que se unen por el relato en retrospectiva que no sólo narra la vida de los protagonistas, sino también el contexto sociocultural de los países donde se llevan a cabo cada una de las tres historias.

















Ver el pasado en retrospectiva para poder explicar el presente y comprender el por qué de los acontecimientos que los acompañan en el presente y el futuro. Ese uno de los elementos que comparten las tres obras. En Delirio cada uno de los personajes, dan cuenta de lo sucedido el día que Agustina Londoño pierde y la razón y tuvo que ser recogida por su esposo Aguilar en el hotel Wellington en la ciudad de Bogotá. Pero detrás de esta búsqueda de la verdad, se esconde el telón de fondo: Colombia en los años 80, cuando estaba en boga el narcotráfico, liderado por Pablo Escobar y como la oligarquía colombiana se veía beneficiada por él. La historia de una mujer que al reconstruir su episodio de delirio, descubre que en su familia nada era lo que pensaba y que parte de la fortuna de su familia, proviene del narcotráfico

...¿O es que tú creías, reina mía, que las cosas eran de otro modo? ¿Acaso no sabías  de dónde sacaban los dólares tu hermano Joaco y tu papá y todos sus amigotes, y tantos otros de las Lomas Polo y de la sociedad de Bogotá y de Medellín, para abrir esas cuentas suculentas en las Bahamas, en Panamá, Suiza y en cuanto paraíso fiscal, como si fueran un jet set internacional? (Restrepo,2004, pág.63)

En Amuleto, Auxilio Lacouture queda encerrada en el baño de la facultad de filosofía y letras, cuando  el 18 de septiembre de 1968, la policía se toma la Universidad Nacional Autónoma de México y desde el encierro, Auxilio empieza a recordar la generación de artistas en México algunos olvidados, algunos en pleno crecimiento artístico, pero detrás de este recuerdo se encuentra la denuncia de los crímenes cometidos en la ciudad de México y en América Latina. Desde el inicio de la novela el lector es advertido

Ésta será una historia de terror. Será una historia policíaca, un relato de serie negra y de terror. Pero no lo parecerá. No lo parecerá porque yo soy la  que lo cuenta. Soy yo la que habla y por eso no parecerá. Pero en el fondo es la historia de un crimen atroz. (Bolaño, pág.11)


El ir y venir  en el tiempo por parte de Auxilio no es muy diferente al de Agustina, cuando le relata a Aguilar (más adelante  lo descubre el lector)  sobre su pasado, su infancia, los golpes que le propinaba su padre a su hermano menor, la infidelidad del padre con la tía Sofi, la necesidad de la madre de guardar las apariencias pasará lo que pasará. Ambos relatos se encuentran envueltos por la tristeza  y algo de culpa. Pero sobre todo en la necesidad de contar lo ocurrido.

De igual forma, ambos relatos buscan de alguna forma luchar contra el olvido. Agustina y el Midas McAlister evocan un pasado que de alguna forma fue perfecto, pero con el pasar del tiempo fue destruyendo ese paraíso perfecto. Agustina al crecer y descubrir que su vida cambió cuando se descubre la infidelidad del padre, la partida de su hermano y el tener que crecer. De ahí que retornar a la finca de Sasaima se convierte para ella en un renacimiento de su alma y de su pasado perfecto, sin engaños ni mentiras
Ésta es la gruta de las orquídeas y ésta la pesebrera y ésta la montura de mi caballo que se llamaba Brandy, y éste el llanito donde jugábamos fútbol, y ladrones y policías por esos corredores, contra ese árbol me caí de Brandy y me partí la Clavícula, Ven Aguilar, siéntate conmigo en esta  hamaca...y ahora vamos, Aguilar, tienes que conocer el rio Dulce, óyelo, desde aquí se escucha...  (Restrepo, pág.296)

En su viaje por el tiempo, Auxilio va recordando las generaciones de poetas anteriores y posteriores a 1968 y empieza a establecer diferencias entre una y otra. Entre el olvido y el recuerdo

Pero me di cuenta (al mismo tiempo que temblaba al verlos) de que su lenguaje era otro, distinto al mío, distinto al de los jóvenes poetas, lo que ellos decían, pobres pajaritos huérfanos, no lo podía entender José Agustín, el novelista de la onda, ni los jóvenes poetas que querían darle en la madre a José Emilio Pacheco, ni José Emilio, que soñaba con el encuentro imposible entre Darío y Huidobro, nadie podía entenderlos, sus voces que no oíamos decían: no somos de esta parte del DF, venimos del metro, de los subterráneos del DF, de la red de alcantarillas, vivimos en lo más oscuro y en lo más sucio, allí donde el más bragado de los jóvenes poetas no podría hacer otra cosa más que vomitar (Bolaño,1999, pág.70)

El recordar de esta forma también toma la función de denunciar y de retomar aquello que para algunos quedó en el olvido y para liberarse de culpas. Otro aspecto que comparte Delirio y Amuleto, pero esta vez con la obra de Philip Roth, Cuando ella era buena. El narrador nos ubica en  el Estados Unidos de 1948 y narra la historia de una mujer  que vivió el maltrato  de su padre hacía su madre y posteriormente el maltrato que le suministró su esposo. Su abuelo Willard mira con nostalgia la tumba de su hermana Ginny y de su nieta Lucy y empieza a recordar lo que sería el inicio de toda la tragedia que envolvió a su familia y nieta. Al igual que la madre de Agustina, el abuelo de Lucy pretende ocultar lo que ocurre en casa, sin importar las consecuencias que traiga a la vida de su hija

-En esta casa somos gente civilizada y hay algunas cosas que no hacemos: esta es la primera. No somos gentuza, debes recordarlo. Somos capaces de arreglar nuestras disputas, de ocuparnos de nuestros asuntos, y no necesitamos que la policía lo haga por nosotros. Jovencita, en caso de que lo hayas olvidado te recuerdo que soy subdirector de Correos de esta ciudad. Soy un miembro bien considerado de esta comunidad...Y tú también. (Roth,1967, pág.32)


Los espacios desde donde los protagonistas se encuentran tienen una importancia compartida porque de alguna forma los transportan y revive ese pasado vivido que los acompaña. Agustina empieza a recordar su infancia al estar en la finca; Auxilio recuerda y ve el futuro desde el baño de la facultad de filosofía y letras; y desde el cementerio empieza el  recuerdo de Willard y la historia de una mujer que tuvo de sufrir por las apariencias. Así, el recuerdo de estos personajes también constituye una historia oculta y que algunos intentan olvidar.     
  Voy a invertir mi fortuna en hacer llorar a este país, así me había dicho Pablo, Agustina bonita, y su fortuna debe ser la más grande del mundo, y si por cada dólar el hombre consigue arrancarnos una lágrima, calcula cuánto nos falta por llorar.  (Restrepo, pág. 211)
Y aunque el canto que escuché hablaba de la guerra, de las hazañas heroicas de una generación de jóvenes latinoamericanos sacrificados, yo supe que por encima de todo hablaba el valor y de los espejos del deseo y el placer. (Bolaño,1999, pág. 154)

En Delirio la verdad corre por parte del Midas, pero también de los descubrimientos que hace Aguilar en los diarios de los abuelos maternos de Agustina. Mientras que el relato de Agustina se convierte en una voz de ayuda. Al unir los tres relatos se comprende el porqué del delirio de Agustina. De igual forma ocurre con la voz de Auxilio Lacouture que en su encierro va reflexionando sobre el crimen en la UNAM, pero también de los jóvenes muertos en América Latina. Agustina podría convertirse en una de las voces de Colombia al mostrar otra cara del narcotráfico, aunque su recuerdo se encuentre envuelto en un velo de inocencia impuesta
Pero no me dejan salir, no me quieren abrir el portón, miran a través de la mirilla entornada, algún día tenía que suceder que hasta Aminta tuviera miedo de algo. ¡Señor leprosito, hágase a un lado para que la niña pase!, grita la tía Sofi, Aun ladito, por favor don leprosito, Suéltame, tía Sofi, que me voy para el colegio, pero ella me retiene con su brazo, me tapa la cabeza con su suéter  de orlón blanco, y así salimos a la calle rapidito, para que yo no vea. (Restrepo,2004 pág.117)  

Lo mismo ocurre con su madre

Tápense los ojos, niños; con las dos manos tápense bien los ojos y prométanme que no miran, pase lo que pase. Nosotros obedecemos. Ella nos sujeta con toda la fuerza de su brazo derecho mientras maneja el timón con el izquierdo; no nos deja levantar la cabeza y nosotros  no podemos ver lo que sucede afuera. Pero podemos escuchar los gritos de la calle, los gritos que se acercan, y sabemos aunque no la vemos que hay gente que pasa junto al auto gritando ¿Qué pasa, madre? Nada no pasa nada...Mi madre quiere protegernos, de algo, de alguien, me doy de eso, sé que alrededor de nosotros ocurren cosas que ella puede ver y nosotros no. (Restrepo, 2004,pág. 123-124)

Mientras que Auxilio Lacouture es “la madre de los poetas de México” que constantemente está recordándole al lector que algo horrible sucedió el 18  de septiembre de 1968 en México, pero también en América Latina. No es gratuito que  se mencione el regreso de Arturo Belano  a Chile y retorne a México en 1974 cambiado  

Quiero decir: la gente, sus amigos, lo empezaron a mirar como si fuera otro aunque él fuera el mismo de siempre. Quiero decir: que todos esperaban que él abriera la boca y contara las últimas noticias del Horror, pero él se mantenía en silencio como si lo que esperaban los demás se hubiera transmutado en un lenguaje incomprensible o le importara un carajo (Bolaño,1999, pág. 69)

En el texto de Roth hay una crítica a los valores de la época que se encargaron de condenar a Lucy Nelson, quien en su afán por no cometer los mismos errores de su madre, termina cediendo a todo lo que dice y hace su esposo Roy

Y, al fin y al cabo, debía respetarlo. No debía discutir lo que decía, ni poner en tela de juicio sus opiniones o criticarlo, especialmente en cuestiones en las que sus conocimientos eran superiores a los de ella. Eso suponía. Era su esposa, debía sentir simpatía por sus opiniones, incluso aunque no siempre estuviera de acuerdo. (Roth, 1967, pág.222)

Este ejercicio de literatura comparada buscaba crear un vínculo argumentativo entre tres textos que fueron escritos en diferentes épocas con diferentes contextos sociales, culturales, políticos e históricos. Considero que ese es otro de los elementos que conecta los tres textos. Delirio retrata a Colombia en los años 80 y principios de los 90 cuando el narcotráfico estaba tomando forma en las clases altas; Amuleto se encarga de denunciar los crímenes cometidos en América Latina en las dictaduras que marcaron la historia del continente; y Cuando ella era buena   no sólo retrata la vida de una mujer que vivió su vida como los demás querían que ella la viviera, sino que también se convierte en un recuerdo sobre las oportunidades de las mujeres en los años 50: casarse  y formar una familia. Pero también se convierte en una crítica al machismo y de alguna forma esconder lo que ocurre para conservar las apariencias.

Aunque tomen contextos diferentes prevalece el conservar las apariencias para preservar la verdad que ha sido contada, y en cada una de las tres historias prima el acto del recuerdo, que tiene un significado importante en la estructura de las obras. Cuando se retorna al pasado se logra ver y comprender aquello que en su tiempo no se logró ver o quiso ver. Si bien las dos novelas latinoamericanas se basan en sucesos históricos que marcaron el contexto en que se desarrolla la historia, en conjunto los protagonistas de las  tres novelas   al mirar en retrospectiva  adquieren una conciencia que les permite analizar lo ocurrido  y de alguna forma justificar, explicar y liberarse de algo que los presionaba y necesitaban sacar.   

Bibliografía

- Bolaño, Roberto (1999). Amuleto. España: Editorial Anagrama.
- Restrepo, Laura (2004). Delirio .Bogotá: Editorial Santillana.
-  Roth, Philip (1967). Cuando ella era buena. Barcelona: Mondadori S.A.

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